16 Ene No aprovechamos lo que sí sabemos
En finanzas, y tal vez a diferencia de otros campos, se puede decir que la ignorancia daña. Por ello, habrá quienes se entreguen a la búsqueda del saber, nadando por la oscuridad intelectual si hace falta hasta dejar atrás la ignorancia. Preguntas que nos podríamos hacer al respecto: “¿Cuánto hay que saber?” o “¿Qué no sé?”.
Cuando me invitan a escribir en el blog “Porque no sabemos de todo”, empiezo a devanarme los sesos sobre aquellos puntos de la industria de fondos que pudieran ser “no sabidas”. Me temo que el presente artículo pretende echar un freno a esta búsqueda infinita de lo desconocido y recalca datos que tal vez no sepamos que ya sabemos sobre la industria financiera y los fondos de inversión. Aprovechar este conocimiento latente que tantas veces pasa desapercibido, puede ayudarnos a tomar mejores decisiones de inversión (o al menos, evitar las malas).
Los siguientes puntos del saber pueden funcionar de manera individual o conjunta:
· Comprar un fondo porque tiene buen ráting no garantiza buenos resultados. El 80% de los fondos empeora dentro de su categoría en los siguientes 3 años de recibir cinco estrellas Morningstar.
· Ignorar fondos que no han destacado puede representar perder una gran oportunidad. A veces, una mala clasificación puede ser debida a un estilo fuera de moda, más que una mala gestión.
· Empíricamente, necesitaríamos más de 50 años de historial para saber si los resultados de un gestor vienen más explicados por la habilidad que por la suerte.
· Los mayores fondos por tamaño o aquellos que más crecen, tienden a aportar menor alfa, incluso restan rentabilidad.
· Estudiar el historial de rentabilidad de un fondo es menos relevante que cuantos activos tiene hoy el fondo, entender el estilo de gestión y su capacidad para mantener las ventajas competitivas. Si desconoces el proceso, no deberías invertir.
· La diversificación per se no siempre es buena. A partir de 15 valores (y hasta 50), los beneficios de diversificar tienden a disminuir. Además, matemáticamente, las carteras concentradas siempre tendrán mayor potencial de batir a los índices.
· No siempre una buena selección de títulos («stock picking”) es necesaria y válida. Si no hay dispersión entre títulos, la gestión activa no bate a la pasiva.
· La variable que mejor ha predicho el éxito futuro de un fondo en una categoría es el TER (gastos totales).
· De promedio, durante los primeros 15 años más de la mitad de fondos son liquidados, absorbidos o fusionados. Deberíamos huir de la publicidad y lanzamiento de nuevos productos financieros como si de un teléfono o coche se tratara.
· Si algo “parece” demasiado bueno…probablemente lo es. Perseguir lo que ha funcionado, no acostumbra a funcionar y la industria financiera es una máquina que convierte cosas sencillas en complicadas, y cobra por ello.
· La valoración en los activos financieros es como la gravedad en la Tierra, aunque la única diferencia es el tiempo que podemos permanecer en el aire. A largo plazo, la valoración es la principal variable explicativa de la rentabilidad.
· El inversor final promedio tiene entre un 1% y 2% menos de rentabilidad anual respecto al fondo en el que invierte. A largo plazo, el inversor final siempre falla en el “market timing”.
· Otros estudios indican que los gestores profesionales -en agregado- no hacen mejor timing que el cliente retail. Así pues, fondos con alta rotación tienen más probabilidades de hacerlo peor (además de aumentar los costes finales).
Podríamos continuar enunciando de manera más extensiva esos conocimientos que sí sabemos de la industria de fondos pero que no siempre tenemos en cuenta al tomar las decisiones de inversión.
Por raro que parezca, pensamos que con una mínima cultura financiera se pueden entender gran parte de los puntos anteriores y en el caso de no ser de esta manera, recomendaríamos rodearse de asesores independientes que velen por nuestro interés, eso es: que sepan por nosotros.
Siento que el presente artículo no haya sido capaz de descubrir un nuevo estilo de gestión o una nueva clase de activo que realmente se adecue a la frase “esta vez es diferente”.
Con la sección “Porque no sabemos de todo” buscamos ofrecerles otras opiniones, las de grandes profesionales del sector de la inversión. Acacia Inversión se enorgullece de contar con las aportaciones de nuestros invitados y está muy agradecida por su colaboración, aunque debemos advertir que las opiniones que ellos expresan en sus artículos pueden no coincidir necesariamente con las de nuestro equipo. Algo que, en todo caso, es un motivo más de satisfacción pues muestra la absoluta libertad que queremos ofrecer a los invitados, en beneficio de nuestros clientes.
- No aprovechamos lo que sí sabemos - enero 16, 2018